Alpina es otro de esos fabricantes minoritarios que, pese a no conocerse mucho en toda la Europa que no es Alemania, acude año tras año al salón de Ginebra para presentar sus novedades más importantes, siempre fabricadas bajo la base de algún BMW recientemente sacado al mercado. Este año, el último BM que ha sido sometido al tratamiento de Alpina ha sido el 435i cabrio, que ha sido renombrado para la ocasión como B4 Bi-Turbo Cabrio.
El motor es el mismo que el del 435i, pero potenciado hasta los 410 CV de potencia, tan sólo 20 menos que el M4. Sin embargo, la diferencia de este coche con el M4 es que Alpina fabrica coches no para batir records en circuito, sino para domingueros que quieran salir a divertirse en una carretera con curvas, una filosofÃa que año tras año conquista más de 2500 compradores sólo en Alemania, lo que no está nada mal para un fabricante como tan peculiar como este.
Eric Serret
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